Hacen que dejar de fumar sea menos difícil

Los medicamentos para dejar de fumar pueden hacer que le sea más fácil porque reducen los síntomas de abstinencia.

Piense en cuando comenzó a fumar cigarrillos. Probablemente fue cuando era un adolescente o un joven adulto. La mayor parte de las personas no se convierte en fumador habitual de la noche a la mañana.

• Los primeros cigarrillos que fumó probablemente le hayan producido una sensación incómoda. Pueden haberle dado un ataque de tos o náuseas. Pero usted siguió probando.
• Tomó tiempo para que su cerebro se acostumbrara a los efectos de la nicotina, la poderosa droga que hay en los cigarrillos.
• Aprendió por experiencia cómo fumar sin que le cause tanta molestia en los pulmones y le provea una cantidad nicotina que fuera suficiente, pero no excesiva.

Dejar de fumar es lo mismo, pero a la inversa.

• Si ha fumado mucho tiempo, puede pasar momentos incómodos y desagradables a medida que se va acostumbrando a estar sin nicotina.
• A esto se lo llama “abstinencia”, que es cuando tiene sensaciones físicas incómodas y podría tener dificultad para concentrarse o dormir. Puede sentir ansiedad e irritabilidad.
• Muchas personas, además, sienten ansias de fumar más fuertes, que pueden volverse difíciles de controlar.