Puntos clave
- Tener diabetes aumenta sus probabilidades de enfermarse, estar enfermo más tiempo o enfermarse gravemente.
- Eso se debe a que la diabetes hace que le resulte más difícil combatir las enfermedades infecciosas, que son enfermedades causadas por microbios.
- Descubra cómo puede fortalecer su sistema inmunitario y mantenerse sano si tiene diabetes.
Cómo funciona su sistema inmunitario
Su sistema inmunitario reconoce y combate los microbios que pueden enfermarlo. Mucha gente piensa en el sistema inmunitario como una protección dentro del cuerpo. Pero la primera línea de defensa es su piel, ya que evita la entrada de microbios no deseados.
La segunda capa del sistema inmunitario consiste en un tipo de glóbulos blancos que circulan por todo el cuerpo, conocidos como linfocitos. Estos glóbulos blancos están al acecho de amenazas que podrían enfermarlo, como bacterias, virus, toxinas u hongos. Una vez que su sistema inmunitario reconoce estos microbios, los combate, a menudo sin que usted lo note.
Su sistema inmunitario también lo ayuda a desarrollar inmunidad o protección contra algunos virus. Una vez que su sistema inmunitario ha aprendido a combatir un determinado virus, a menudo recuerda cómo hacerlo nuevamente. Si usted está expuesto a un virus más de una vez, su sistema inmunitario por lo general puede combatirlo más rápido. Puede que tenga menos síntomas, o no tenga ninguno, si ya ha estado expuesto a ese virus específico. Las vacunas funcionan al darle instrucciones a su sistema inmunitario sobre cómo combatir un virus, y lo protegen a usted para que no se enferme gravemente.
Cómo la diabetes afecta su sistema inmunitario
Los altos niveles de azúcar en la sangre le agregan estrés al cuerpo y hacen que casi todos los sistemas trabajen aún más. Esto incluye los glóbulos blancos de su sistema inmunitario. Si tiene diabetes, su sistema inmunitario podría estar debilitado y ser menos eficaz. El nivel alto de azúcar en la sangre también puede desencadenar una respuesta inmunitaria protectora llamada inflamación, que con el tiempo puede dañar sus órganos internos.
Si tiene inflamación, su sistema inmunitario está trabajando aún más. Si esto sucede cuando su sistema inmunitario quizás ya está debilitado, es más difícil combatir las infecciones. Las investigaciones muestran que las personas con diabetes pueden tener enfermedades más frecuentes, entre otras:
- Infecciones de los pulmones
- Influenza (gripe)
- Neumonía
- Infecciones urinarias
- Infecciones de la piel
También podría tomar más tiempo curarse o recuperarse de enfermedades, cortes y heridas.
Si se enferma, podría notar que sus niveles de azúcar en la sangre son más altos de lo normal. Para combatir las enfermedades, su sistema inmunitario libera hormonas que pueden aumentar temporalmente el nivel de azúcar en la sangre. Algunos medicamentos para el resfriado y la influenza también pueden elevar el nivel de azúcar en la sangre. Por otro lado, tener fiebre, poco apetito o sudar pueden causar un nivel bajo de azúcar en la sangre. Asegúrese de monitorear el nivel de azúcar en la sangre de cerca, y tome medidas si es demasiado alto o demasiado bajo.
La diabetes tipo 1 y su sistema inmunitario
Diabetes, COVID-19 e influenza (gripe)
Las personas con diabetes podrían no estar en mayor riesgo de enfermarse de COVID-19 o de influenza. Sin embargo, las investigaciones muestran que tienen un mayor riesgo de enfermarse gravemente por los virus que causan estas enfermedades. Esto es especialmente cierto si su nivel de azúcar en la sangre no se maneja bien.
Usted puede protegerse del COVID-19 y de la influenza vacunándose y manteniéndose al día con todas las dosis de refuerzo para las cuales sea elegible. Las vacunas son una forma segura y eficaz de evitar enfermarse gravemente.
Cómo mantenerse sano si tiene diabetes
Hay muchas cosas que puede hacer para fortalecer su sistema inmunitario:
Mantenga sus niveles de azúcar en la sangre dentro de los valores deseados para proteger su sistema inmunitario. Esto puede ayudar a prevenir enfermedades a corto y largo plazo, y a ayudarlo a recuperarse más pronto si se enferma.
Coma muchas frutas y vegetales. Las frutas y los vegetales son ricos en vitaminas y minerales que ayudan al buen funcionamiento de su sistema inmunitario. Trate de comer frutas y vegetales de todos los colores que pueda para obtener una variedad de vitaminas y minerales. Hable con su médico antes de tomar cualquier suplemento de vitaminas o minerales.
Haga actividad física. La actividad física puede ayudarlo a manejar sus niveles de azúcar en la sangre y a mantener su sistema inmunitario fuerte en caso de que se enferme.
Lávese las manos. Los microbios pueden propagarse de las superficies que toca todos los días. Lavarse las manos a menudo es una manera importante de mantenerse sano.
Maneje el estrés. Si su nivel de estrés es alto, el sistema inmunitario podría tener más dificultad para combatir las infecciones. El estrés también puede elevar los niveles de azúcar en la sangre. Sepa cómo reconocer cuando su nivel de estrés es alto y practique actividades relajantes como conciencia plena (mindfulness), meditación o yoga. Incluso 5 minutos pueden ayudarlo a relajarse.
Duerma lo suficiente. Estar bien descansado es importante para la salud de todos. Si duerme regularmente menos de 7 horas, será más difícil controlar su diabetes. Dormir muy poco también puede hacer más difícil que el sistema inmunitario combata las infecciones.
Vacúnese y manténgase al día
Las vacunas son una forma crucial de protegerse contra enfermedades y prevenir enfermedades graves. Las vacunas son especialmente importantes para las personas con diabetes. Asegúrese de preguntarle a su médico sobre su calendario de vacunación si no está seguro de estar al día:
La vacuna contra el COVID-19 se recomienda para todas las personas, pero es especialmente importante para las personas con diabetes tipo 1 o tipo 2. Asegúrese de recibir las dosis iniciales, así como las dosis de refuerzo para las que sea elegible.
La vacuna contra la hepatitis B se recomienda para todos los adultos menores de 60 años. Es especialmente importante para las personas con diabetes tipo 1 o tipo 2, quienes tienen un mayor riesgo de contraer hepatitis B.
La vacuna contra la influenza (gripe) se recomienda cada año para todas las personas mayores de 6 meses, y especialmente para las personas con diabetes que podrían tener el sistema inmunitario más débil.
La vacuna antineumocócica se recomienda para los adultos de 65 años o más y para los adultos de 19 a 65 años con ciertas enfermedades o factores de riesgo, incluida la diabetes.
La vacuna contra la culebrilla se recomienda para todos los adultos de 50 años o más, incluso si ya han tenido culebrilla (herpes zóster) o varicela, o si han recibido la vacuna contra la varicela.
La vacuna Tdap se recomienda cada 10 años para proteger contra el tétanos, la difteria y la tosferina (pertussis).