Características clínicas del dengue

Presentación clínica

El dengue inicia repentinamente después de un periodo típico de incubación de entre 5 y 7 días, y el curso sigue 3 fases: febril, crítica y de recuperación.

Los signos clínicos tempranos son no específicos. El dengue requiere tener un alto nivel de sospecha, porque reconocer los primeros signos de choque e iniciar rápidamente la terapia intensiva de apoyo con líquidos intravenosos puede reducir el riesgo de muerte entre los pacientes con dengue grave a <0.5 %.

Los hallazgos de laboratorio comúnmente incluyen leucopenia, trombocitopenia, hiponatremia, niveles de aspartato-aminotransferasa (AST, por sus siglas en inglés) y alanina-aminotransferasa (ALT, por sus siglas en inglés) elevados, y una tasa de sedimentación eritrocítica (ESR, por sus siglas en inglés) normal.

Fase febril

• La fiebre generalmente dura de 2 a 7 días y puede tener dos fases.
• Otros signos y síntomas podrían incluir dolor fuerte de cabeza; dolor retroorbital; mialgias o artralgias; sarpullido macular o maculopapular; y manifestaciones hemorrágicas menores como petequia, equimosis (hematoma), púrpura, epistaxis, sangrado en las encías, hematuria, o un resultado positivo de la prueba del torniquete.
• Algunos pacientes tienen eritema orofaríngeo y facial en las primeras 24 a 48 horas después del inicio de la enfermedad.

Signos de alarma

Los signos de alarma de la evolución hacia el dengue grave por lo general ocurren en la última parte de la fase febril alrededor del momento de defervescencia, e incluyen vómitos persistentes, dolor abdominal continuo intenso, acumulación de líquidos, sangrado de mucosas, letargo/irritabilidad, hipotensión postural, agrandamiento del hígado y un aumento progresivo del hematocrito (p. ej., hemoconcentración).

Fase crítica

• La fase crítica de dengue comienza en la deferverscencia y generalmente dura de 24 a 48 horas.
• La mayoría de los pacientes mejora clínicamente durante esta fase; sin embargo, los que tienen una extravasación significativa del plasma, en unas horas pueden presentar dengue grave.
• Al comienzo, los mecanismos fisiológicos compensatorios mantienen una circulación adecuada, lo que reduce la presión diferencial al mismo tiempo que aumenta la presión arterial diastólica.
• Los pacientes con extravasación grave del plasma podrían tener derrames pleurales, ascitis, hipoproteinemia, o hemoconcentración.
• Los pacientes podrían parecer estar bien a pesar de los signos tempranos de choque. Sin embargo, una vez que se presenta hipotensión, la presión arterial sistólica desciende rápidamente, y podrían seguir un choque irreversible y la muerte a pesar de la reanimación.
• Los pacientes también pueden presentar manifestaciones hemorrágicas graves como hematemesis, hematoquecia, o menorragia, especialmente si han estado en choque prolongado. Las manifestaciones poco frecuentes incluyen hepatitis, miocarditis, pancreatitis y encefalitis.

Fase de recuperación

• Cuando la extravasación del plasma baja, el paciente entra en la fase de recuperación y comienza a reabsorber los líquidos intravenosos extravasados y los derrames pleurales y abdominales.
• A medida que mejora el bienestar de un paciente, se estabiliza el estado hemodinámico (aunque podría presentar bradicardia) y ocurre la diuresis. El hematocrito del paciente se estabiliza, o podría disminuir debido al efecto de dilución del líquido reabsorbido, y el recuento de glóbulos blancos generalmente comienza a aumentar, seguido de una recuperación del recuento de plaquetas.
• El sarpullido de la fase de recuperación podría descamarse y ser pruritoso.

Clasificación del dengue de la OMS, 2009

El dengue se define como una combinación de ≥2 signos clínicos en una persona febril que viva en un área endémica de dengue o haya viajado a ella en los últimos 14 días. Los signos clínicos incluyen náuseas, vómitos, sarpullido, dolores y molestias, un resultado positivo de la prueba del torniquete, leucopenia o cualquier signo de alarma.

Los signos de alarma del dengue incluyen dolor o sensibilidad abdominal, vómitos persistentes, acumulación de líquidos sintomático, hemorragia mucosa, letargo, irritabilidad y agrandamiento del hígado. Los pacientes con signos de alarma deberían monitorearse de cerca, ya que es más probable que evolucionen a enfermedad grave.

El dengue grave se define como dengue con cualquiera de las siguientes manifestaciones clínicas: extravasación grave del plasma que cause choque o acumulación de líquido con dificultad respiratoria; sangrado grave; o deterioro grave de los órganos, como tener hepatitis (transaminasas elevadas de ≥1000 IU/L), compromiso de conciencia o insuficiencia cardiaca.