Leche fortificada de vaca y alternativas a la leche

Su hijo en crecimiento necesita vitaminas y minerales, como vitamina D y calcio, para desarrollar huesos fuertes. La leche de vaca pasteurizada entera y las bebidas de soya que han sido fortificadas con vitamina D son buenas fuentes de vitamina D y calcio. La mayoría de la leche de vaca que se consigue en las tiendas de los Estado Unidos está fortificada con vitamina D.

Elija leche, o alternativas a la leche que no tengan sabores adicionales o azúcar añadida. La leche con sabor y las bebidas de soya forticadas pueden tener azúcar añadida . Su hijo no necesita azúcar añadida.

¿Cuándo debo comenzar a darle leche fortificada de vaca a mi hijo?

A los 12 meses de edad (pero no antes), su hijo puede recibir leche fortificada de vaca. Antes de que su hijo cumpla los 12 meses de edad, la leche fortificada de vaca podría causarle sangrado intestinal. Además, tiene demasiadas proteínas y minerales que los riñones del bebé aún no pueden procesar, y no contiene la cantidad adecuada de nutrientes que su bebé necesita.

¿Cuánto, con qué frecuencia?

Los niños necesitan una dieta equilibrada y diversa. La leche de vaca y las bebidas de soya fortificadas pueden ser parte de esta dieta, pero no son la única opción. Las pautas dietéticas para estaudinenses recomiendan que los niños de 12 a 23 meses de edad consuman de 1⅔ a 2 tazas en productos lácteos, esto incluye leche fortificada de vaca yogur, queso, bebidas de soya fortificadas y yogur a base de soya. Si su hijo bebe demasiada leche de vaca, podría no tener hambre para ingerir otros alimentos que contienen nutrientes importantes. Algunos expertos afirman que consumir demasiada leche de vaca puede causarle al cuerpo de su hijo dificultades para absorber el hierro que necesita de los alimentos.

Siga las señales de su hijo para decidir si aún tiene hambre o si ya está lleno. Hable con el médico o el personal de enfermería de su hijo si tiene más preguntas sobre cómo incorporar leche de vaca o bebidas de soya fortificadas a su dieta.

¿Leche de vaca entera o con bajo contenido de grasa?

Los niños pueden beber leche de vaca entera que no tenga sabores adicionales o azúcar añadida. La leche de vaca entera es la misma que la leche de vaca con bajo contenido de grasa, excepto que tiene mayor contenido de grasa. Es importante que los niños consuman grasa en su dieta para un crecimiento y desarrollo saludables. Si su hijo tiene exceso de peso o antecedentes familiares de obesidad, colesterol alto o triglicéridos, o enfermedad cardiovascular, hable con el médico o el personal de enfermería de su hijo sobre el tipo de leche de vaca que debe darle.

Leche cruda

La leche cruda y los productos lácteos crudos de vaca, cabra y oveja pueden contener bacterias dañinas y otros gérmenes que podrían causarle enfermedades graves a su hijo, e incluso, la muerte. La leche cruda también se conoce como leche no pasteurizada. No le dé a su hijo leche cruda o no pasteurizada.

Alternativas a la leche

Las alternativas a la leche de vaca pueden incluir leche de soya, leches de frutos secos (almendras, coco, anacardo u otras) y leches de arroz. Si elige una alternativa a la leche de vaca, estas son algunas cosas que debe recordar:

• Las alternativas a la leche de vaca no se deben dar antes de los 12 meses de edad.
• Las bebidas de soya fortificadas son las únicas alternativas a la leche de vaca que pueden ayudar a satisfacer las necesidades lácteas recomendadas para su hijo.
• Elija una que no tenga sabor y que no tenga azúcar añadida. Su hijo no necesita azúcar añadida.
• Elija una que esté fortificada con vitamina D y calcio. Verifique las etiquetas ya que el contenido de nutrientes puede variar según la marca.
• Hable con el médico o el personal de enfermeria de su hijo sobre la alternativa a la leche que está usando porque las vitaminas y los minerales de estos tipos de leche son diferentes de los de la leche de vaca.

Visite Vitaminas y Minerales para obtener más información sobre las vitaminas y los minerales que su hijo necesita.