Niñez mediana (6 a 8 años)
Indicadores del desarrollo
La niñez intermedia implica muchos cambios en la vida de un niño. A esta edad, los niños ya pueden vestirse por sí solos, atrapar una pelota más fácilmente solo con las manos y amarrarse los zapatos. Ahora es más importante para ellos ser un poco más independientes de la familia. Eventos como comenzar a ir a la escuela hacen que los niños a esta edad entren en contacto regular con un mundo más amplio. Las amistades se vuelven más importantes. En esta etapa desarrollan rápidamente habilidades físicas, sociales y mentales. Es fundamental que en esta etapa el niño aprenda a adquirir confianza en todas las áreas de la vida, como en las amistades, las actividades escolares y los deportes.
Los siguientes son algunos aspectos del desarrollo en la niñez intermedia:
Cambios emocionales y sociales
Los niños a esta edad:
- Muestran más independencia de los padres y la familia.
- Comienzan a pensar en el futuro.
- Entienden mejor el lugar que ocupan en el mundo.
- Prestan más atención a las amistades y al trabajo en equipo.
- Desean ser queridos y aceptados por sus amigos.
Razonamiento y aprendizaje
Los niños a esta edad:
- Desarrollan rápidamente sus habilidades mentales.
- Aprenden mejores maneras de describir sus experiencias, sus ideas y sus sentimientos.
- Se enfocan menos en sí mismos y se preocupan más por los demás.
Consejos de crianza positiva de los hijos
Estas son algunas cosas que usted, como padre, puede hacer para ayudar a su hijo en esta etapa:
- Demuéstrele afecto. Reconozca sus logros.
- Ayúdelo a desarrollar el sentido de la responsabilidad; por ejemplo, pídale ayuda con las tareas del hogar, como poner la mesa.
- Hable con su hijo sobre la escuela, los amigos y las cosas que desearía hacer en el futuro.
- Hable con su hijo sobre el respeto hacia los demás. Anímelo a ayudar a las personas necesitadas.
- Ayúdelo a establecer metas alcanzables; de esta manera, aprenderá a sentirse orgulloso de sus logros, y a depender menos de la aprobación y el reconocimiento de los demás.
- Enséñele a ser paciente; por ejemplo, a esperar su turno y a terminar una tarea antes de ir a jugar. Anímelo a que piense en las posibles consecuencias antes de hacer algo.
- Ponga reglas claras y respételas; por ejemplo, establezca por cuánto tiempo puede ver la televisión y a qué hora tiene que acostarse. Sea claro acerca de los comportamientos que son aceptables y los que no lo son.
- Hagan cosas divertidas en familia, como participar en juegos, leer y asistir a eventos en la comunidad.
- Involúcrese en la escuela de su hijo. Reúnase con los maestros y el personal escolar para entender sus objetivos de aprendizaje y saber cómo trabajar juntos para ayudar a su hijo a lograr dichos objetivos.
- Continúe leyéndole a su hijo. A medida que su hijo vaya aprendiendo a leer, túrnense en la lectura.
- Utilice la disciplina para guiarlo y protegerlo, en lugar de usar castigos que lo hagan sentirse mal consigo mismo. En vez de analizar lo que no debe hacer, explíquele lo que sí debe hacer.
- Felicite a su hijo por su buen comportamiento. Es mejor centrarse más en elogiar las cosas positivas que hace su hijo (“te esforzaste mucho en resolver esto”) que en las características que no puede cambiar (“eres inteligente”).
- Ayude a su hijo a enfrentar nuevos retos. Anímelo a resolver por sí solo sus problemas, como los desacuerdos con otros niños.
- Motive a su hijo, tanto en la escuela como en la comunidad, a que participe en actividades de grupo como algún deporte, o a que aproveche las oportunidades de realizar trabajo voluntario.
La seguridad de los hijos es lo primero
Al tener más independencia y aptitudes físicas, los niños corren más riesgo de sufrir lesiones por caídas y otros accidentes. Los accidentes automovilísticos son la causa más común de muerte por lesión accidental entre los niños de esta edad.
- Proteja a su hijo adecuadamente cuando viaje en automóvil. Encuentre información más detallada en “Asientos de seguridad para automóvil: una guía para las familias” de la Academia Estadounidense de Pediatría.
- Enséñele a su hijo a estar atento al tráfico y a seguir medidas de seguridad mientras camina hacia la escuela, cuando ande en bicicleta o cuando juegue afuera.
- Asegúrese de que su hijo entienda las medidas de seguridad relacionadas con el agua, y supervíselo siempre que esté nadando o jugando cerca del agua.
- Supervise a su hijo cuando esté realizando actividades peligrosas, como trepar.
- Hable con su hijo sobre cómo pedir ayuda cuando la necesite.
- Mantenga fuera del alcance del niño productos del hogar potencialmente peligrosos, como herramientas, equipos y armas de fuego.
Cuerpos saludables
- Los padres pueden ayudar a que las escuelas sean más saludables. Colabore con la escuela de su niño para que se limite el acceso a alimentos y bebidas con azúcar agregada, grasas sólidas y sal que se puedan comprar fuera del programa de almuerzo escolar.
- Asegúrese de que su niño realice por lo menos una hora de actividad física al día.
- Limite el tiempo que su hijo pasa frente a pantallas a no más de 1 o 2 horas al día de programas adecuados, ya sea en casa, en la escuela o en los centros para cuidado después de la escuela.
- Practique hábitos de alimentación saludables y actividad física desde edades tempranas. Aliente a su hijo a que participe activamente en juegos, y dé el ejemplo comiendo alimentos saludables durante las comidas en familia y al llevar un estilo de vida activo.
- Asegúrese que su hijo duerma la cantidad recomendada cada noche. Niños de 6 a 12 años: de 9 a 12 horas cada 24 horas.